La Leyenda del Hijo del Duque - Capítulo 98
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- Capítulo 98 - Yo me encargaré del bebé (2)
Sin embargo, Shen Liang rechazó su amabilidad. Ante los ojos confundidos de Pei Yuanlie, dijo con voz profunda:
“Su Alteza, ¿ha olvidado que no solo soy el hijo legítimo del Duque de la Mansión Dongling, sino también hijo de Wei Zeqian? Aquel año, mi abuelo parecía haber cortado la relación con mi papá, pero le dejó algo muy valioso. Solo que, si quería obtenerlo, necesitaba una oportunidad. Mi papá no la tuvo… pero yo sí.”
El manual médico-venenoso y los guardias del Abismo Oscuro eran los mayores talismanes de vida del clan Wei, y ahora se habían convertido en su carta más poderosa. Ya era hora de que ciertas personas vieran de lo que era capaz el clan Wei.
“¿Guardias del Abismo Oscuro?”
La sonrisa en el rostro de Pei Yuanlie desapareció, y su expresión se volvió indescriptiblemente seria. Los guardias del Abismo Oscuro no eran originalmente una tropa secreta, sino los guardias personales de Jiang Heng, esposa del dios de la guerra Wei Ting, ancestro del clan Wei. Al principio, no eran muchos, pero más tarde nadie supo con exactitud cuántos eran. Hace cientos de años, su capacidad de combate era asombrosa, y podían considerarse la tropa más fuerte bajo el mando del dios de la guerra y de su esposa Jiang Heng. Lástima que, con la muerte de la pareja, los guardias del Abismo Oscuro desaparecieron por completo de la vista del público.
En su momento, no fue que nadie sintiera curiosidad por su paradero, pero era como si hubieran desaparecido en el aire, acorde a su nombre. Algunos decían que habían sido disueltos antes de la muerte de la pareja; otros afirmaban que se suicidaron y los siguieron al inframundo. También había quienes especulaban que se dispersaron en pequeños grupos, ocultos en distintos rincones del Reino Qin. Que, si el reino o el clan Wei enfrentaban una calamidad, sin duda se reunirían nuevamente para luchar por el mundo.
Existían muchas teorías extrañas sobre ellos, pero con el silencio del clan Wei y el paso del tiempo, la gente fue olvidando su existencia… excepto la familia imperial. Durante cientos de años, si no todos los emperadores, al menos dos tercios de ellos habían intentado obligar al clan Wei a entregarlos o disolverlos. Pero todos sin excepción fracasaron. El clan Wei actuaba como si no supiera nada acerca de la existencia de los guardias del Abismo Oscuro. No importaba cuántas insinuaciones hicieran los emperadores, siempre fingían no entender y jamás revelaban nada.
La razón por la que Pei Yuanlie lo sabía era por su shifu, el Ermitaño Pico Nevado. Nadie sabía que “Ermitaño Pico Nevado” no era una sola persona, sino un linaje de personas, aunque solo el líder de cada generación permanecía en lo más profundo de la montaña nevada. Su origen se remontaba a cientos de años atrás. La aparición de Jiang Heng en aquel entonces había cautivado muchos corazones. El primer Ermitaño Pico Nevado fue uno de ellos. Él era amigo y consejero de Jiang Heng, además de medio discípulo suyo. El día en que Jiang Heng y Wei Ting celebraron su gran boda, después de haber ayudado al emperador a fundar el reino, él se retiró en silencio a las montañas nevadas. Desde entonces, cada líder transmitía el conocimiento sobre esa pareja, incluso si eran asuntos de siglos atrás.
Lógicamente, Pei Yuanlie no era quien debía ser el próximo líder. Su shifu, el actual Ermitaño Pico Nevado, no debería haberle contado esas cosas. Pero debido a su identidad y condición física especiales, terminó contándole absolutamente todo: el manual médico-venenoso y los guardias del Abismo Oscuro.
“¿Cómo lo sabes?”
Al escucharlo, Shen Liang quedó igualmente sorprendido. Excepto por el clan Wei, debería haber muy poca gente que conociera su existencia. En su vida anterior, Qin Yunshen y los demás lo supieron porque él, tontamente, se los había contado.
“¿Así que los guardias del Abismo Oscuro realmente están en tus manos?”
Era fácil saberlo por la reacción de Pei Yuanlie. Aunque se mostraba calmado por fuera, por dentro estaba impactado. Nunca habría imaginado que Shen Liang tuviera semejante carta oculta. No era de extrañar que supiera tantas cosas que ni siquiera sus guardias de hierro sabían. Incluso la gente que había enviado a investigar sus antecedentes no había encontrado nada.
Había que admitirlo: Su Alteza estaba pensando demasiado. Pero incluso si Shen Liang lo adivinaba, no lo negaría. Después de todo, sí sabía muchas cosas que los demás no sabían.
“Mm.”
Desde que había decidido usar a los guardias del Abismo Oscuro, Shen Liang nunca pensó en ocultárselo. Después de convivir cierto tiempo con él, ya lo conocía un poco. Era diferente a Qin Yunshen. Además, Pei Yuanlie le había contado el secreto de Huo Yelin sin reservas. Era claro que no lo consideraba un extraño. Dado que su hermano mayor estaba con Huo Yelin, sería demasiado mezquino seguir ocultándole cosas.
“¿Entonces tus habilidades médicas también las heredaste del manual médico-venenoso?”
Pei Yuanlie mostró nuevamente una sonrisa, complacido por su sinceridad, aunque no preguntó más sobre los guardias del Abismo Oscuro.
“¿También sabes del manual médico-venenoso? Parece que realmente tienes conexiones con el clan Wei, ¿eh?”
Alzando una ceja, Shen Liang no lo negó; podría decirse que prácticamente lo admitió. Después de todo, cuando desintoxicó a Murong Yun, Yaoguang había presenciado todo el proceso. Si no conociera el manual, podría inventarse alguna excusa. Pero ya que Pei Yuanlie lo sabía, no había necesidad.
“Tengo algunas conexiones con el clan Wei, sí. Pero no fueron ellos quienes me contaron estas cosas. Creo que tú también sabes que el clan Wei jamás menciona nada relacionado con el manual médico-venenoso ni con los guardias del Abismo Oscuro. En realidad, fue mi shifu…”
Dobló un dedo y le dio un suave golpecito en la frente, antes de entrelazar su mano con la suya. Luego comenzó a contarle, con afecto, lo referente al Ermitaño Pico Nevado.