Super doctor interestelar - Capítulo 25
Xiào Mu agarró la cortina con la mano derecha mientras observaba a Leo desnudarse poco a poco, y sintió ganas de llorar.
¿Por qué está Leo aquí?
Xiào Mu por fin había esperado a que iniciaran las clases para poder quedarse en el dormitorio de la escuela. También pensó que así podría mantenerse alejado de Leo y no tendría que mantener su barrera espiritual por tanto tiempo. ¿Y el resultado? Leo terminó en el dormitorio justo enfrente del suyo.
Leo se quitó la camisa, desató el cinturón y estaba por bajarse los pantalones. Entonces detuvo sus manos y miró con severidad hacia el dormitorio de enfrente.
Xiào Mu cerró rápidamente las cortinas de forma incómoda, bloqueando la vista entre los dos. ¿No pensará Leo que se mudó ahí a propósito para espiarlo?
Mirando las cortinas cerradas, Leo frunció el ceño con fuerza. Xiào Mu realmente vino aquí. Es tan débil, ¿podrá aguantar en esta escuela? Echó un vistazo al dormitorio de enfrente y presionó un botón junto a la ventana. Al instante, el vidrio pareció cubrirse con una capa de niebla blanca. Esta función no afecta a quienes están dentro para ver hacia afuera, pero desde afuera solo se ve esa capa blanca.
Xiào Mu se sentó en la cama y revisó los arreglos del dormitorio escolar. La Universidad de la Academia Militar Imperial comparte el campus con el departamento de educación superior. La parte norte es el área de dormitorios, al noroeste está el departamento universitario, y al noreste el de educación superior. Hay un total de 30 edificios de dormitorios, que originalmente estaban divididos entre individuales (edificios 1 al 10), dobles (11 al 20), y cuádruples (21 al 30). Con el paso del tiempo, la tasa de ocupación de los cuádruples disminuyó mientras que la demanda por habitaciones individuales de lujo se disparó, provocando escasez. Por eso, 9 edificios cuádruples fueron demolidos y convertidos en dormitorios individuales. Actualmente, solo queda el edificio 30 como cuádruple, y aun así, no está lleno. Los dormitorios individuales son lujosos y espaciosos, por lo que los edificios posteriores quedaron más cercanos entre sí, especialmente los más nuevos.
Xiào Mu cerró su terminal, pensando en su interior que con razón su dormitorio está tan cerca del de enfrente, y que también con razón es el único en su unidad de dormitorio hasta ahora. ¡Además, se sorprende del estado financiero tan fuerte que tienen los estudiantes!
Al día siguiente, Xiào Mu se levantó muy temprano. Su propósito era claro: el próximo año se especializaría en el departamento de medicina. Así que ya había organizado el horario de clases desde ayer. Esa mañana habría un curso introductorio de materiales médicos. Después de asearse y bajar, Xiào Mu caminó hacia la cafetería siguiendo el mapa. Observaba el plano escolar en su terminal mientras caminaba, ya que quería familiarizarse con el lugar cuanto antes. Una ráfaga de viento lo rodeó y, al levantar la vista, vio una figura corriendo frente a él.
¡Qué velocidad tan loca! pensó, asombrado.
En el camino, los estudiantes pasaban junto a él uno tras otro, y Xiào Mu finalmente pudo mirar con calma a sus compañeros que corrían veloces. Ya cerca de la cafetería, un centinela alto de cabello negro lo rodeó de repente y se le plantó enfrente. Xiào Mu no esperaba que alguien se interpusiera tan de golpe y no pudo detenerse a tiempo, por lo que chocó contra el centinela. Estaba por dar un paso atrás cuando una mano le sujetó firmemente la cintura. Una voz burlona vino desde arriba: “¿Eres nuevo? ¿A dónde vas? Yo te llevo.”
Xiào Mu frunció el ceño y trató con fuerza de apartarlo, sin éxito. Apretó los dientes y se movió hacia un lado para poner distancia. “No es necesario.”
“¡¿Qué chingados te pasa?!” Al moverse, Xiào Mu bloqueó sin querer a otro compañero que venía detrás, quien lo maldijo molesto.
“Perdón.” Xiào Mu volteó y vio a un centinela alto de cabello castaño que lo miraba con desagrado. Se hizo a un lado rápidamente.
“¡Cuida tu actitud!”, gritó el centinela de cabello negro al de cabello castaño. “¿Nomás porque te estorba ya te pones a chingar? ¿Y qué si busca pleito?”
El centinela castaño se arremangó y se le fue encima. Sin más, le lanzó un puñetazo. “¿Buscando pleito? ¡Te voy a madrear, basura! ¿Todavía quieres ligar?”
“¿Tú madrearme? ¡Lárgate!”
Los centinelas se agarraron a golpes al instante. Xiào Mu se quedó pasmado por la pelea, pero los estudiantes que pasaban no se sorprendieron. Algunos actuaron como si no vieran nada y siguieron su camino, mientras otros rodearon a los peleadores y empezaron a animarlos. Al ver que ya había sangre en ambos, Xiào Mu miró alrededor y detuvo a un chico de aspecto amable que era un poco más bajo.
“¿Dónde está la oficina de los maestros?”
El chico lo miró de reojo. “¿Para qué quieres un maestro?”
“Si siguen peleando así, puede pasar algo grave.”
El chico lo miró como si estuviera loco. “¿No estarás pensando ir por un maestro para que los detenga?”
Xiào Mu asintió, y el chico dijo: “Ni lo pienses. Mientras no se mueran, a los maestros no les importa.”
Apenas terminó de hablar, vio cómo el centinela castaño le soltaba un puñetazo en la cara al otro y gritó emocionado: “¡Bien hecho, dale otro!”
Xiào Mu miró a los espectadores animar y aplaudir con entusiasmo. Luego miró a los dos compañeros peleando. Después de pensarlo, abrió su terminal y entró a la red escolar. Llamó a la oficina de seguridad del campus y dijo directamente: “Dos centinelas están peleando frente a la cafetería.”
“¿Eres de nuevo ingreso? Bah, eso es cualquier cosa. No se van a matar. Si te gusta ver peleas, quédate. Si no, sigue con lo tuyo. Al rato mandan al equipo médico.”
Xiào Mu miró el terminal colgado sin palabras. ¿En serio estaba exagerando? Se quedó un rato parado y pronto llegaron dos del equipo médico con batas blancas. En vez de separarlos, se unieron a los espectadores. Uno hasta gritó: “¿¡Eso es todo!? ¿Por qué le das cachetadas? ¡Pégale en el estómago!”
Xiào Mu se fue con cara de pocos amigos rumbo a la cafetería. Compró su desayuno y se sentó en una esquina a comer. En lo que terminó su comida, fue testigo de tres peleas más: una cuerpo a cuerpo, otra donde uno quiso pelear pero lo noquearon con medicina, y una pelea que pasó de golpes a mechas, bombardeándose fuera de la cafetería. Todas iniciaron sin razón aparente. Una por pelearse por los asientos, y otra por chocar al pasar.
Bebiendo su jugo y limpiándose la boca, Xiào Mu pensó que muchos de sus compañeros sufren de irritabilidad; debe recordar mantener la distancia. Tiró la servilleta en la mesa y tocó con el dorso de la mano el bolsillo lateral de su mochila; al confirmar que aún tenía las inyecciones anestésicas que le dio Ren, se sintió un poco más tranquilo.
Cuando Xiào Mu llegó a la clase introductoria de materiales médicos, vio que eran las 7:30 am. La clase comenzaba a las 8:00 am. Empezó a calcular el tiempo que gastaba en desayunar y caminar al aula, y reorganizó su rutina de ejercicio matutino. En los 10 días antes de entrar a la escuela, se ejercitaba cada mañana y noche. Combinando eso con las píldoras de recuperación física, logró duplicar su entrenamiento, y ahora tenía 260 puntos de resistencia física. Aunque aún era poco, estaba feliz. Al menos había mejorado, ¡ya podía correr 5 km seguidos!
Gracias a eso, valoraba más el ejercicio. Ese primer día de clases aún no conocía bien la escuela y temía llegar tarde si hacía ejercicio, así que abrió el material del curso para leer con anticipación. Cerca de las 8:00 am, los estudiantes empezaron a llenar el aula hasta llegar a 200 personas. Xiào Mu se preocupó un poco. Con tanta gente, es muy fácil que haya roces. Pero nadie peleó. Aunque sí hubo quienes se insultaron con frases como: “A la salida del edificio, te voy a partir la cara.” Xiào Mu recordó lo que dijo Hawke: “Durante clase es completamente seguro.”
A las 8:00 am, su terminal vibró. Era un mensaje de Hawke.
‘¡Ahhh, estuve experimentando hasta tarde ayer! No me levanté a tiempo y solo conseguí asiento en el salón 2 para la clase de materiales. ¿Tú en cuál estás?’
Xiào Mu miró hacia el frente y vio un enorme número 1 en la pared.
‘Creo que es el salón 1.’
‘Qué mal, quería estar en la misma clase que tú. Como vamos al departamento de medicina, tendremos los mismos cursos. En el futuro elijamos el mismo salón.’
‘Está bien.’
‘Ya viene el profe, hablamos después.’
A las 8:05 am, un hombre alto, vestido completamente de blanco y con un rostro elegante, entró al aula y se sentó en el podio.
“Queridos alumnos, abran sus terminales y conéctense al dispositivo del escritorio.”
Xiào Mu observó a su compañero de al lado e imitó su movimiento apuntando su terminal hacia la pantalla LED negra sobre la mesa. En ese momento, se desplegó una pantalla virtual frente a él, y el maestro apareció en ella. En la esquina superior izquierda, comenzó una cuenta regresiva.
“Si quieren hacer medicina, primero deben aprender a reconocer los ingredientes medicinales. Deben entender su forma externa y efecto. Es una habilidad básica que todo estudiante de medicina debe dominar.”
La voz del maestro era seria. “Muchas medicinas parecen iguales, pero algunas son venenosas y otras beneficiosas. Si se equivocan, podrían causar consecuencias irreversibles.”
La pantalla cambió y apareció una hierba. Xiào Mu parpadeó. ¿No es ruibarbo? La voz del maestro sonó a su lado, “Primero, identifiquemos las hierbas más comunes, ruibarbo…”
El tono del maestro no era apresurado, solo leía la teoría según el curso. Mostró muchas fotos del ruibarbo en distintas etapas. Luego mezcló imágenes de hierbas similares para formar un tablero de 9 cuadros para que los estudiantes identificaran.
Xiào Mu seleccionó cuidadosamente las 2 imágenes correctas y en la pantalla apareció un efecto de fuegos artificiales: [¡Felicidades, respuesta correcta!]
“Dios mío,” murmuró su compañero con tono triste. “Perdí 5 minutos.”
Xiào Mu lo miró sin entender, y el otro señaló con cara amarga la esquina superior izquierda.
“Si respondes mal, te descuentan 5 minutos de clase. Solo ganas un crédito cada 40 minutos.”
Al escuchar eso, Xiào Mu se sintió motivado a prestar mucha más atención. Si se distraía y se equivocaba, no obtendría créditos. Antes pensaba que asistir medio día era suficiente, pero ahora se daba cuenta de que la calidad importaba más.
Cada lección principal del curso se compone de 2 clases pequeñas, con un descanso de 10 minutos entre ellas. Luego hay un receso de 30 minutos entre lecciones principales. Hay 2 lecciones principales en la mañana y 2 en la tarde. Si uno estudia todo el día, puede obtener hasta 8 créditos en un día.
Después de la primera lección principal, Xiào Mu se frotó el cuello. Había subestimado lo difícil que sería concentrarse tanto tiempo. Era bastante agotador mantener la atención durante toda la clase.
Hawke le envió un mensaje:
‘Te espero en la puerta del salón 1.’
Xiào Mu salió del aula y vio a Hawke saludándolo con la mano. Hawke corrió hacia él y preguntó:
“No hay más clases del departamento de medicina esta mañana. ¿Vas a volver al dormitorio o tomarás clases públicas?”
“Voy a la clase de educación física.”
Las clases públicas son solo clases pequeñas de 40 minutos. La escuela exige que se acumulen 5 créditos de educación física por semana. Es decir, hay que asistir al menos a 5 clases. Xiào Mu temía que el entrenamiento fuera demasiado exigente, así que decidió tomar una clase diaria.
“Yo también voy.” Hawke le tomó la mano y lo jaló.
Al bajar las escaleras, escucharon a alguien gritar “¡Buen golpe!”, y vieron a un grupo observando una pelea entre dos estudiantes. Entre risas, la multitud se dispersó repentinamente cuando uno de los peleadores fue pateado lejos, cayendo cerca de donde estaba Xiào Mu. Al verlo, reconoció que era uno de los que habían lanzado amenazas antes de clase. ¡Sí que cumplió su promesa! Xiào Mu rodeó al grupo y se alejó hacia una zona con menos gente.
Hawke lo miró y preguntó:
“¿Estás asustado?” Luego se detuvo. “Espera, te voy a dar una poción.”
Xiào Mu lo detuvo:
“No hace falta. Si la diferencia de fuerza es muy grande, ni siquiera habrá oportunidad de usar una poción, ¿no crees?”
Mientras hablaba, vio que Hawke miraba alrededor, como buscando algo. Al notar que no sacaba nada, preguntó:
“¿Qué haces?”
Hawke se rascó la cabeza.
“Mi almacenamiento espacial está todo desordenado. Estoy pensando qué poción darte.”
“¿Almacenamiento espacial?” repitió Xiào Mu. El término era fácil de entender, pero aún así lo desconcertó.
Hawke levantó su mano izquierda y le mostró el dedo meñique. Llevaba un anillo plateado con patrones simples.
“Este. Tú también puedes comprar uno, solo cuesta un millón por metro cúbico. No es caro.”
¿No es caro? Xiào Mu solo tenía poco más de 900,000 monedas estelares. Él pensaba que tenía una buena cantidad, pero esta conversación lo hizo sentir pobre. Sin embargo, al mirar el anillo, pensó que definitivamente compraría uno cuando tuviera dinero. Su mochila contenía píldoras de curación y de energía, así que no quería que nadie la tocara. El almacenamiento espacial parecía mucho más seguro.
“Vámonos,” le dijo a Hawke, que aún buscaba la medicina. “Yo también traigo medicina en la mochila. Y como dije antes, si alguien tiene tanta fuerza, no me va a dejar inyectarlo con mi lentitud.”
Hawke se preocupó aún más. Después de caminar un rato, sus ojos brillaron:
“¡Ya sé! Puedes usar una versión en spray. Espera a que lo investigue después.”
Xiào Mu se rió al escuchar eso.
“Gracias.”
Hawke se rio también.
“No hay de qué, somos amigos. Además, eres tan guapo, ¡debo protegerte!”
A Xiào Mu se le torció la boca.
“¿Puedes no mencionar que soy guapo?”
Hawke parpadeó y de repente pareció entender.
“Lo siento, no lo diré más.” Se inclinó y susurró: “Pero sinceramente, si entraste a esta escuela, ¿no será porque tienes alguna habilidad especial?”
Xiào Mu negó con resignación.
“No.”
La verdad, durante los 8 días que trabajó en el domo de batalla antes de que iniciaran las clases, trató a unos 7 centinelas por día. Gracias a eso, su poder espiritual se desbloqueó bastante. Solo que, mientras más alto era el nivel, más lento se desbloqueaba. Al llegar a 7,000 puntos (Nivel B), la velocidad era 1/4 de su consumo. Al alcanzar 8,000 puntos (Nivel A), se redujo a 1/8. Y al superar los 9,000 puntos (Nivel S), se volvió 1/16. Ahora, tenía que tratar a 6 centinelas para desbloquear solo 100 puntos. Su poder espiritual actual era de 9,100 puntos, Nivel S. A excepción de unos pocos centinelas de Nivel SS en todo el imperio, casi nadie lo superaba. Pero no podía revelar ese poder. Fuera de tratar centinelas, ocultar su identidad y preparar medicina, Xiào Mu no encontraba otro uso para su habilidad.
“¿Entonces cómo se te ocurrió venir a esta escuela?” Hawke estaba sorprendido. Pensaba que Xiào Mu tenía alguna habilidad secreta.
Xiào Mu respondió con honestidad:
“No sabía cómo era esta escuela. Además, todas las escuelas de medicina estaban llenas.”
Al ver que Hawke empezaba a preocuparse de nuevo, Xiào Mu sonrió.
“No pasa nada. Esos tipos pelean para presumir. Ganarme a mí no les da ningún orgullo. Estaré bien mientras no provoque a nadie.”
Hawke lo miró unos segundos y luego sonrió con brillo en los ojos.
“Cierto. Como eres tan guapo, menos gente te buscará pleito. Y si alguien se atreve, tus admiradores se encargarán de defenderte.”
Xiào Mu hizo una mueca. ¡No quiero depender de mi cara! Luego miró a Hawke. Su estado físico y altura no destacaban en la escuela, y su verdadera identidad era la de un guía. ¿No debería mantenerse lejos de una escuela llena de centinelas?
“¿Y tú por qué viniste a esta escuela?” no pudo evitar preguntar.
Los ojos de Hawke se iluminaron.
“¡Por mi dios masculino! El próximo año estará en la universidad y podré verlo.”
“¿El próximo año?” preguntó Xiào Mu, curioso.
Hawke sonrió soñadoramente.
“Este año, las clases de educación física de la universidad están a cargo de un general de división del Primer Ejército. El próximo año, le tocará al Segundo Ejército. Ese general dijo hace dos años que esperaba regresar como maestro sustituto a su alma máter.”
Xiào Mu pensó en Leo y preguntó:
“¿Te refieres al General de División Leo? ¿Dará clases de educación física este semestre?”
Hawke negó con la cabeza.
“No creo que logremos tener a Leo. Hay varios generales en el Primer Ejército. Es más probable que sea otro.”
Xiào Mu pensó para sí: ¿Qué no? El maestro sustituto claramente es Leo. Si no, no se explica por qué un general vive en los dormitorios escolares.
“¿No íbamos al gimnasio? Ya falta poco para la clase de educación física,” señaló Xiào Mu al ver que estaban por entrar a la cafetería de nuevo.
Hawke se rascó el cabello.
“No desayuné y ya me dio hambre. Faltan 30 minutos para la clase. Siéntate a descansar un rato.”
A Xiào Mu no le molestó esperar. Cuando Hawke volvió con su porridge y pan, Xiào Mu no pudo evitar decir:
“Compra galletas y guárdalas en tu mochila. Así puedes comer algo entre clases si te da hambre.”
“¿Galletas?” Hawke negó con la cabeza. “Solo los niños del departamento infantil comen eso.”
Xiào Mu lo miró confundido. ¿Comer galletas tiene límite de edad? Abrió su terminal para revisar el mapa escolar. Descubrió que, además de seis cafeterías, no había tiendas de botanas. Solo había tres tiendas de paquetes nutritivos.
“¿No comen nada de snacks?”
“Dejé de comerlos al cumplir diez años. No tienen valor nutricional.” Hawke bajó la voz. “Aunque la verdad, los paquetes nutritivos saben horrible.”
¿Toda la población del planeta dejó los snacks? ¡Eso sí es impresionante! Pensando en eso, recordó que no ha comido nueces en mucho tiempo, y lo mismo con Fatty. Al pensar en Fatty, le dio dolor de cabeza. Originalmente planeaba dejarlo salir de vez en cuando en el dormitorio, pero ahora que Leo vivía tan cerca, solo podía dejarlo salir a tomar aire fresco por poco tiempo.
Después de comer, los dos llegaron al gimnasio de ejercicios. El primer salón ya estaba lleno con 200 personas, así que fueron al segundo. El profesor de educación física, Gillett, era un centinela alto de nivel BB+, de piel oscura y vestido con un conjunto negro ajustado que imponía bastante.
“En la primera clase de hoy, revisaremos su nivel de condición física. Las actividades se organizarán en clase según el nivel físico de cada quien.”
Pronto, los 200 estudiantes se formaron en 10 filas, con 20 alumnos por fila, de acuerdo a las instrucciones de Gillett. Al frente había 10 máquinas de prueba física, por lo que se evaluaban 10 personas al mismo tiempo. Los resultados se enviaban directamente al terminal del profesor, quien luego asignaba el plan de entrenamiento correspondiente.
Xiào Mu y Hawke estaban en la última fila. Al ver la dinámica, Xiào Mu se sintió un poco aliviado. Era genial que enseñaran según la capacidad de cada alumno. ¡Temía que todos hicieran lo mismo y él no pudiera seguir el ritmo! Pronto fue su turno. Xiào Mu avanzó y se colocó sobre la máquina. Un rayo de luz blanca lo escaneó desde la cabeza hasta los pies.
“Listo.” Gillett no levantó la vista y rápidamente envió las asignaciones predefinidas a los estudiantes según su capacidad. De pronto, se detuvo, alzó la cabeza y gritó:
“¡Xiào Mu!”
Xiào Mu estaba mirando su terminal para revisar su plan de entrenamiento. Al escuchar a Gillett, respondió de inmediato:
“Presente.”
Gillett lo escaneó de arriba abajo con la mirada y caminó hacia él con sus largas piernas. Lo miró desde arriba y preguntó:
“¿Nivel E de fuerza física?”
Hubo murmullos sorprendidos detrás, seguidos de risas burlonas.
“Qué patético, ¿cómo se atreve a entrar a la academia militar?”
“¿No va a bajar el promedio general de la escuela?”
Xiào Mu sintió las miradas clavarse en su espalda. Se arrepintió profundamente de haber ingresado a esta escuela. ¡Ojalá hubiera alcanzado lugar en alguna escuela de medicina!
“Sí.” Aún con la mirada de Gillett fija en él, Xiào Mu respondió en voz baja.
Gillett alzó las cejas y le dio una palmada en el hombro izquierdo. La fuerza hizo que la rodilla izquierda de Xiào Mu se doblara y su cuerpo se inclinara hacia ese lado. Gillett retiró su mano de inmediato y tosió,
“Tienes valor. Pero aún no hay plan para nivel E. Corre o haz algo de pesas si quieres. Mañana te enviaré el plan ya organizado.”
Xiào Mu se sintió un poco apenado. Claramente, jamás habían tenido a alguien de nivel E en la Academia Militar Imperial.
“Gracias, profesor.”
Gillett hizo un gesto con la mano y Xiào Mu se dirigió a las pistas de correr. Notó que varios compañeros lo miraban con burla.
Hawke corrió hacia él y preguntó:
“¿Estás bien?”
“Sí, el profe fue amable conmigo.”
Hawke miró alrededor:
“Voy a correr contigo y luego caminamos juntos a la salida.”
Xiào Mu sabía que Hawke se preocupaba por él y sonrió:
“Está bien.”
Después de clase, Xiào Mu no salió enseguida del estadio. Esperó a que la mayoría se fuera. Inesperadamente, alguien lo interceptó en su camino al dormitorio.
“¿Qué haces aquí?” Un centinela alto con camiseta de rayas verticales se acercó con paso largo y expresión molesta.
Xiào Mu se quedó pasmado. El centinela era apuesto, pero no lo reconocía. Sin embargo… vio las barras rojo y azul: poder espiritual 2880/3000, fuerza física 6800/7800, nivel B+. Obviamente, este tipo había tomado sus medicinas antes.
“¡Te estoy hablando!” Al ver que Xiào Mu no respondía, el centinela se enfureció más. Miró a su alrededor y bajó la voz:
“Si no hubiera visto tu foto en el foro, no sabría que estabas aquí.”
Por la voz y estatura, Xiào Mu tuvo una corazonada. ¿No será el tipo que le compró 150 píldoras de curación media? ¿Pero qué quería decir con “ver su foto en el foro”?
Hawke reaccionó más rápido. Abrió el foro, tocó el codo de Xiào Mu y exclamó:
“¡Eres famoso en el foro! ¡Salen tú y el Mayor General Leo!”
Xiào Mu suspiró en su mente. No era raro que la llegada de Leo causara revuelo, ¿pero él también?
Entró al foro de la Academia Militar Imperial. El primer post popular era “El Mayor General Leo da clases de educación física”, y el segundo: “¡Aparece estudiante con fuerza física nivel E!”. Lo abrió y, antes de leer el contenido, vio una foto suya corriendo en el gimnasio. Estaba por seguir leyendo cuando una mano le dio un manotazo, causando un dolor punzante.
“¿Qué haces?” Xiào Mu frotó su mano y fulminó con la mirada al centinela.
El centinela, molesto por ser ignorado, se exaltó más.
“¡Xiào Mu, tienes agallas! ¡Te estoy hablando! ¿Qué haces aquí? ¿¡Papá sabe esto!?”
Xiào Mu frunció el ceño.
“Te estás confundiendo, no te conozco.”
“¡Deja de fingir!” gritó el centinela, aún más alterado. “Eileen se ha estado culpando todo este tiempo. ¿Por qué no nos dijiste que estabas vivo? ¿Querías que papá nos echara la culpa?”
“¿Tu padre es Kain Greene?” Xiào Mu entendió.
Recordaba bien que en el video donde secuestraban a Xiào Mu Greene, había un joven y una chica con él. Dado que este lo llamó por ese nombre y mencionó a una chica, seguramente era de la familia Greene.
“¿Estás loco?” Roa Greene lo miró incrédulo. “¿Te atreves a llamar a papá por su nombre así?”
Era tal como pensaba.
Xiào Mu explicó:
“Te equivocas. Xiào Mu Greene y yo sí nos parecemos, pero no soy él. El Mayor General Kain ya lo sabe y admitió su error.”
“¿Dices que mi papá lo sabe?” Roa dudaba, pero al oír que su padre lo sabía, se confundió.
Xiào Mu asintió.
“Sí. Mi color de ojos y cabello es distinto al del pequeño Greene.”
Roa lo miró un rato. Aunque tenían diferencias en el temperamento y apariencia, sus rasgos eran como copiados. Frunció el ceño con disgusto.
“¿Dices que no son iguales? Los dos son basura. Aunque no seas él, igual de fastidioso. ¿Buscas la muerte viniendo a una escuela militar con tan poca fuerza?”
Luego añadió con voz filosa:
“¿Eres hijo ilegítimo de su madre con otro hombre?”
Con rostro frío, Xiào Mu respondió sin rodeos:
“Qué despreciable la educación de los Greene. Acusaciones sin prueba ni tacto… muy ilustrativo.”
“¿¡Qué dijiste!?” Roa se enfureció al escuchar que mencionaba a su familia y trató de abofetearlo.
Hawke bloqueó la bofetada de inmediato y lo miró fijamente.
“¿¡Qué crees que haces!?”
Roa lo miró con desprecio:
“¿Vas a ser el héroe que salva a la princesa? ¿Crees poder contra mí?”
Roa medía más de 1.90 m, mientras que Hawke rondaba el 1.80 m. Claramente, Hawke no era rival. Xiào Mu sacó su jeringa anestésica y dijo con frialdad:
“¿Y si entre los dos te enfrentamos?”
Los ojos de Hawke brillaban, sin miedo.
“Seré un gran estudiante del Departamento de Medicina. ¿Quieres probar cómo se siente una inyección anestésica?”
Roa apretó la mandíbula y desvió la mirada, furioso.
“¡Esto no se queda así!”
Al verlo alejarse enfadado, Hawke exclamó emocionado:
“¡Xiào Mu, estuviste genial! ¡Te veías tan cool y guapo!”
Xiào Mu guardó su inyección con una sonrisa divertida.
“Tú te viste más guapo. Yo solo hablé.”
Hawke se rascó la cabeza, ojos brillando:
“¿En serio? ¿De verdad soy guapo?”
Pffft.
Xiào Mu no pudo evitar reír y asintió. El mal humor que le dejó Roa se le pasó un poco. Pero recordó sus amenazas, así que advirtió:
“Ten cuidado si lo ves de nuevo.”
Se mordió los labios. Si hubiera sabido que Roa le daría problemas, no le habría vendido las píldoras.
Hawke no le dio importancia:
“No le tengo miedo. A partir de ahora, te espero abajo para ir juntos a clases. El aula y el dormitorio son seguros. Caminando contigo, no hay bronca.”
Xiào Mu respondió:
“Está bien.”
…
En otro lugar, en la oficina de maestros, Gillett miraba la sección vacía del formulario titulada Plan de ejercicios en clase para nivel E y no sabía ni por dónde empezar. Se pasó la mano por la cara, frustrado. Como profesor de educación física profesional, este asunto realmente lo tenía bloqueado. Gillett escarbó en su memoria, pero no podía recordar si alguna vez había conocido a alguien con fuerza física nivel E. No tenía ninguna referencia.
Le preocupaba que cualquier plan fuera demasiado exigente para el cuerpo del estudiante. Tras pensarlo un rato, decidió abrir el grupo de intercambio de maestros de educación física de la academia y pidió ayuda:
“¿Cómo se hace el plan de ejercicios en clase para un estudiante con fuerza física nivel E?”
Apenas envió el mensaje, varias respuestas llegaron de inmediato:
— “¿Gillett, ya te estás inventando cosas de puro aburrido?”
— “Qué ocioso estás. ¿Para qué te preocupas por un caso que ni va a pasar?”
— “Los dos de arriba seguro no han abierto el foro hoy. Gillett, tuviste suerte. Ese estudiante nivel E fue a tu clase, ¿verdad?”
Gillett rodó los ojos:
“Sí, y no se olviden del calendario de clases. Todavía no le asignan todas las materias, así que podría ir a la clase de cualquiera mañana.”
— “¡Wow! Acabo de ver el foro. Qué niño tan lindo, y qué valiente.”
— “Esta pregunta sí está difícil. Nadie cerca de mí tiene una condición tan baja.”
— “Espera, voy a preguntarle a mi amigo del kínder. Tal vez tenga buenas ideas.”
Finalmente, Gillett encontró una respuesta más útil. Pensando en ello, abrió su lista de contactos. Conocía a un profesor del departamento infantil. Aunque no daba educación física, quizá podía ayudarle a entender la resistencia de alguien con nivel E. Mientras deslizaba los nombres, su terminal vibró ligeramente. Gillett abrió el mensaje nuevo: tenía un archivo adjunto. Lo abrió y vio que era un plan completo de entrenamiento para nivel E.
Al leerlo, se sorprendió de que los ejercicios fueran tan ligeros. Miró al remitente: era un número desconocido. Pero al bajar la vista, se quedó atónito: el nombre decía Sustituto temporal – Leo Arnold, ¡y lo había enviado desde el grupo de maestros de educación física!
Gillett se levantó de un salto, temblando de la emoción. ¡No podía creer que su ídolo lo contactara personalmente para ayudarlo! Intentó escribir varias respuestas, pero las borraba y cambiaba una y otra vez. Al final, envió:
“Gracias, Mayor General Leo. Su sabiduría es admirable.”
Después de enviar el mensaje, Gillett soltó un largo suspiro. Se dejó caer en su silla y pensó: Mi ídolo realmente es digno de ser General del Primer Ejército… ¡hasta sabe cómo entrenar a un estudiante de nivel E!
…
En una oficina personal, Leo miraba dos pantallas virtuales. A la izquierda, el foro de la escuela. A la derecha, su conversación con Gillett. Al ver la respuesta del profesor, Leo resopló ligeramente. Si no fuera por conocer a Xiào Mu, él tampoco tendría idea de qué significaba “nivel E” más allá de la palabra débil.
Viendo las fotos del foro, frunció el ceño. Qué fastidio. Ese tipo ya atrajo la atención desde el primer día.
— “Quisiera ser tan fuerte como tú… Yo también me siento impotente.”
Las palabras de Xiào Mu aparecieron en su mente. Leo apretó los labios. Sabía que Xiào Mu había estado ejercitándose todos los días antes de entrar a clases. Él lo había visto. Por eso sabía que, aunque lento, estaba progresando. Tal vez simplemente tenía una base muy pobre.
Volvió a leer el plan que le había mandado a Gillett, cerró la interfaz y se puso a revisar los asuntos oficiales que le había enviado su asistente.
…
Después de regresar al dormitorio, Xiào Mu pidió por internet 5 catties (2.5 kg) de avellanas, nueces y macadamias. También compró otros 5 catties de harina y varios ingredientes para hornear galletas. Tras hacer el pedido, levantó una barrera espiritual a su alrededor. Su barrera se hacía más gruesa con cada nivel. Al alcanzar nivel S, el grosor era de 5 cm.
Después de construir la barrera, extendió con cuidado un hilo de poder espiritual. Tras un rato, confirmó que no sentía ninguna anomalía, así que liberó todos sus filamentos. Al desplegarse, flotaban como algas en el mar. Xiào Mu se sintió especialmente cómodo.
Un gordo ardillón apareció frente a él, saltó a sus brazos y le frotó la cabeza en el pecho.
Una sonrisa iluminó los ojos de Xiào Mu, y abrazó a su ardilla gigante:
“Perdón, fue mi culpa. También te extrañé, y te compré nueces, ¿eh?”
Al escuchar la palabra nueces, Fatty se paró de golpe con su colita moviéndose como loco. Obviamente, estaba muy emocionado.
Después del almuerzo, todo lo que Xiào Mu compró ya había llegado, así que dejó salir a Fatty de nuevo. No pudo evitar sentirse alegre al ver a la ardilla feliz entre el montón de nueces. Luego, fue a la cocina a hornear galletas. En su vida anterior, Xiào Mu era pediatra y solía calmar a los niños con galletas caseras… y sabían bastante bien.
Cuando las galletas ya casi estaban listas, todos sus filamentos espirituales se agitaron de repente en dirección a la zona de dormitorios. Xiào Mu reaccionó al instante, los retiró y verificó que su barrera siguiera intacta. Desde que alcanzó el nivel S, su control era mucho más preciso y rápido.
Menos de 5 metros antes de llegar al Edificio 29, Leo entró al dormitorio sin sospechar nada y subió al sexto piso. Apenas entró a su cuarto, un aroma dulce lo envolvió. Caminó hacia la ventana y vio que Xiào Mu la había dejado abierta. Estaba colocando galletas en una charola redonda.
Al oler el dulce aroma, Xiào Mu no pudo resistir y se llevó una galleta a la boca. El sabor dulce y cremoso se expandió por sus papilas, haciéndolo sonreír con los ojos. De pronto, le pareció escuchar que alguien lo llamaba. Se acercó a la ventana y vio a un chico alto en el quinto piso del edificio de enfrente.
El joven preguntó:
“¿Qué estás haciendo? ¡Huele delicioso!”
Xiào Mu vio que el muchacho se inclinaba peligrosamente por la ventana y rápidamente le respondió:
“Galletas. Y cuidado, es peligroso asomarse tanto.”
El joven no se preocupó, estiró el cuello tratando de ver mejor.
“¡Véndeme unas, huelen riquísimo!”
Aunque los dormitorios estaban cerca entre sí, cada piso era bastante alto. Solo los del mismo nivel podían ver directamente hacia adentro. A Xiào Mu se le ocurrió una idea y sonrió:
“Es mi primera vez haciéndolas aquí. Te regalaré unas. Si te gustan, me compras después.”
Volvió al mesón, llenó una pequeña lata de galletas, la ató con una cuerda y la bajó hasta el quinto piso. Cuando el joven la recibió, Xiào Mu soltó la cuerda y dijo:
“Las de arriba son dulces, las de abajo saladas. Prueba a ver cuáles te gustan más.”
El chico se metió a su cuarto dejando solo la mano afuera y gritó:
“¡Gracias!”
Xiào Mu respondió que no era nada y retiró la cabeza. Al ver el botón de insonorización junto a la ventana, pensó que no lo activaría, al menos no mientras no durmiera. Escuchar algo de ruido del exterior era agradable.
“Click…”
Un sonido vino del otro lado. Xiào Mu volteó y vio cómo se abría la ventana blanca. Detrás estaba ese rostro helado e inexpresivo.
Ugh. Xiào Mu saludó con la mano. Sabiendo que los centinelas tenían oído agudo, solo alzó un poco la voz:
“Buenas tardes.”
Leo asintió, pero su mirada se fijó en la charola con galletas junto a Xiào Mu. Al notar eso, Xiào Mu pensó que seguramente había visto que ya había regalado unas galletas. Tomando en cuenta que había vivido en su casa tanto tiempo, y que ahora había horneado, debía ofrecerle también.
Sonrió y dijo:
“Espera un momento.”
Buscó dos frascos pequeños, llenó uno con galletas dulces y otro con saladas. Luego volvió a la ventana:
“Acabo de hacerlas. No sé si te gusten.”
Cuando estaba por extender medio cuerpo por la ventana para pasarle los frascos, escuchó a Leo decir:
“No te muevas.”
En el siguiente segundo, Leo saltó al alféizar de la ventana, se sujetó con los pies de la parte inferior y con una mano de la superior. Luego descendió ágilmente hasta estar frente a Xiào Mu, tomó los frascos con ligereza, y volvió a su cuarto de un salto.
Xiào Mu se quedó helado por la maniobra tan extrema. Estaba por decir algo cuando escuchó el click de la ventana cerrándose. No había cortinas, pero todo lo que se veía era blanco.
Xiào Mu hizo una mueca. ¡Qué grosero!
Leo miró los frascos con expresión neutra. Apartó el de sabor salado y, sin decir nada, abrió el de galletas dulces. Ya que Xiào Mu se las dio por iniciativa propia, no iba a rechazarlas.
Aunque siendo honesto… los dulces no me gustan mucho.